Un hechizo amoroso ingles de tipo parecido pero más sofisticado, exige que conozca realmente al hombre que busca hasta el punto que el acepte una golosina que usted le de sin sospechar de sus ulteriores motivos, tome un poco de tierra de la huella que haya dejado y algunos recortes de sus propias uñas, mezcle ambos ingredientes con esencia de naranja y dispóngalo para que el los coma. No hay instrucciones especiales con respecto a la forma de servir estos polvos diabólicos a su amante, por lo que puede utilizarse su iniciativa, los hombres siempre dicen que el camino a su corazón pasa por el estomago, pero probablemente no sonreirían tan complacidos si conocieran dos estupendos encantamientos amorosos de gitana que trabajan basándose en una teoría similar, en realidad no volverían ha hablar con brujas si pensaran en un momento que pudieran utilizar esos hechizos con ellos, son atemorizadores. En la magia no hay nada tan poderoso como la conexión hecha con una víctima por medio de algo perteneciente al propio cuerpo, por medio de esta conexión está usted colocando una voluntad abrumadora, su fuerza mágica está aplicada directamente sobre una persona y el deberá caer inmediatamente sobre su hechizo, así es como lo hacen las jóvenes gitanas. Por la noche en el campo cogerá algunas setas comestibles frescas, llévelas a casa, hay picarlas y mezclarlas con dos gotas de su propia sangre, (pueden pincharse el dedo con un a aguja, o de su mestruación), servir la mezcla a quien quiere que sea su amante.
Otra poción es más fácil de hacer pues no necesitará ir al campo y deambular por el por la noche buscando frutas. Haga que brote un poco de sangre y deje que caiga sobre uno de sus pañuelos usados, queme ahora el pañuelo y esparza la ceniza en la ensalada del novio (naturalmente, en ambos encantamientos aplicará la apropiada concentración de la bruja). Si después, ese atractivo hombre resultara ser un sádico o algo igualmente molesto puede apagar su interés cogiendo algún elemento personal de él (un calcetín) y quemándolo. Las brujas modernas tienen algunas ventajas sobre sus hermanas medievales, porque ahora la magia ni se estudia ni se entiende, por eso pocas personas serán realmente conscientes de lo que les sucede cuando se las está embrujando ¿quien de nosotros podría averiguar con precisión la intención de una sonriente joven de mejillas sonrosadas? que buscando los ingredientes del hechizo mágico, amablemente le quita una pestaña caída del rabillo del ojo de su amante (oye, se te podría infectar), o pide un hilo del traje cardin de su hombre (el color es maravillosos y quiero hacerme un vestido con el, no echarás de menos un hilo, el pelo es fácil de conseguir (siempre he pensado que estarías estupendo con un peinado afro, déjame peinarte así para verlo), etc, etc,.
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